LECTURA: Crónica de un viaje a Conce
por Faustino García Rey
Agosto, 2023.
14: 45 Tomo el bus a Santiago, en el camino le escribo al Hostal BB de Conce para contarles que he decididoquedarme ahí y que llegaré cerca de las 12 de la noche. Me responden que hay una habitación disponible, pero no pago la reserva.
17 : 30 En el terminal de Santiago las pantallas de tv dan noticias inquietantes sobre un frente de mal tiempo en la zona centro sur. Mis miedos a los viajes largos de noche, a los cortes de puentes, a quedar aislado se amplifican.
18: 50 El bus a Conce sale del Terminal Sur de Santiago, en el camino me pongo a leer Adriana Una Interpretación Queer de Ricardo Espinoza Lolas, la lectura me cautiva, el autor dice que el “eterno retorno” de Nietzsche no significa que lo que vuelve sea lo mismo y que el amor, el vínculo, el baile y la traición de Ariadna podría ayudarnos a salir dellaberinto del capitalismo.
Sábado 19 de Agosto, 2023
00: 45 llegamos al terminal de Collao y tomo un taxi para el hostal, llueve a cántaros. Encuentro al recepcionista durmiendo en una banca de la cafetería del hostal, se levanta de mala gana y revisa el libro, me dice que la habitación no se reservó porque no pagué el adelanto y que debo buscar otro hostal. Llamo a varios hostales y todos dicen estar fullocupados, finalmente en el Hotel Araucano me dicen que tienen una pieza junior con una cama de una plaza.
01: 30 Llego al Hotel Araucano y el recepcionista me dice que encontró otra pieza con una cama de dos plazas, subo al 5to piso y la habitación tiene un calefactor gigante destartalado con un sonido insoportable. Me cambian a otra habitación, me acuesto e intento leer pero estoy demasiado cansado, reviso el Whatsapp y encuentro un audio de P, me pregunta si estoy enrolado para visitar a H y que la cárcel concesionada tiene restricciones para llevar alimentos.
10: 30 salgo a buscar una farmacia Knop y una peluquería quiero cortarme el pelo para parecerme a la foto del carnet y no tener líos con los gendarmes. P me envía otro audio preguntándome donde estoy y si ya desayuné. Me pide comprar pan en el centro.
Tomo un taxi para ir a la casa de P, el taxista es un jubilado de la fuerza aérea, va escuchando noticias en la radio y mueve la cabeza cuando escucha al Secretario Grl del PC diciendo que la “derecha se está aprovechando” me cuenta que es mecánico de aviones y que trabaja para la Kauffman. Nos ponemos a conversar de la familia Kauffman le cuento que cuando era chico iban al tranque del Asentamiento a navegar y andar en motos acuáticas y que dejaron de ir cuando llegaron otros visitantes que hacían los mismos deportes a pito de nada me cuenta que C K se hizo rico comprando y vendiendo vehículos Mercedes Benz que compraban diplomáticos chilenos.
Llego a la casa de P, la última vez que nos vimos fue hace 6 o 7 años, tomamos té y conversamos de nuestras familias lepido permiso para decirle una frivolidad que me encanta su pelo blanco, P tiene a la mitad de la familia presa, el hijo menor en la cárcel de Temuco y el del medio en la cárcel concesionada de Conce, P me cuenta que cuidó mucho al hijo menor pero que durante la pandemia muchos jóvenes mapuches se fueron al campo y el conflicto se intensificó. También hablamos de M el muchacho que mató carabineros y que en un primer momento dijeron que era el hijo del medio de P. Hacemos panes con queso y le entrego los libros que traje para H, P se queda con Calibán y la Bruja de Silvia Federici y la Comunidad del Azote de Natalia Berbelagua, coincidimos en que tenemos que evangelizar a H con ficción feminista. Me cuenta que en la cárcel no dejan ingresar ropa y que si queremos ingresarla tenemos que llevarla puesta, P me pide ponerme una manta de lana mapuche.
En el supermercado compramos bebidas transparentes, mate sin palitos, galletas sin relleno y un pollo asado. Mientras esperamos el uber P me cuenta que está divorciada de H que trabaja en un hospital y está terminando un magíster. Le pregunto por su sobrino B y me cuenta que está bien, viviendo en el campo en Tirúa, cuidando a su hija y cocinando mientras su señora trabaja. El padre de B murió en la pandemia de una ulcera esperando una hora médica.
14:00 En la cola de ingreso a la cárcel P me presenta a D un amigo de H que fue mirista en los 90 y que se quedó viviendo en la zona, D habla bajito y no logro escuchar bien todo lo que me dice. Cuando llegamos a la ventanilla el gendarme le dice a D que no puede entrar porque aparece rechazado en el sistema, el gendarme le pregunta si se enroló previamente y D le dice que si que vino a la misma cárcel a hacer el trámite la semana pasada. Como era de esperar cuando el gendarme revisa mis datos me dice lo mismo que a D.
Los familiares de los presos que han logrado pasar sin problemas nos dicen que tratemos de ingresar por la guardia que está a un costado de la cárcel. Esperando en la guardia D me cuenta de los 90, del fracaso del guevarismo en la Provincia de Arauco, de algunas traiciones y asesinatosincomprensibles, de hijos e hijas que quieren saber por quésus propios compañeros mataron a sus padres, de amigos que huyeron a Argentina y nunca volvieron, de V que intentó quemarse a lo bonzo en una cárcel de Santiago. Le cuento a D que solo una vez vi a V a comienzo de los 90 y me pareció el hombre más divertido del mundo y que muchos años después vi una foto de V con su papá preso en Punta Peuco pidiéndole a la presidenta que lo dejara morir en su casa, D me dice que algunos no entendieron esa foto y criticaron a V yo le digo a D que el vínculo padre -hijo es natural y no político y que era mejor que el padre de V muriera en su casa.
Le cuento a D que a principio de los 90 era un colaborador de mala gana y que eso significó descalificaciones bien humillantes y después un alejamiento de H, que después de 15 años me topé con él en un terminal de buses y que desde entonces lo he ido a ver a varias cárceles, que la amistad ahora es más comprensiva.
15: 00 aparece un joven teniente en la guardia y nos pregunta si venimos de Temucuicui, el teniente trata de ayudarnos, pero un coronel le dice por teléfono que si no estamos enrolados y aceptados por H no podemos ingresar. Al rato aparece otro gendarme y nos dice que si H escribe una autorización nos dejarían entrar.
15: 30 H escribe la autorización y por fin ingresamos, en la sala de visitas abrazos van y vienen, tomamos mate y le entrego la manta. H está muy enojado con el gobierno especialmente con el presidente y el PC, dice que nunca seha sentido tan maltratado. Nos cuenta que lleva un año preso por ley de Seguridad Interior que lo acusan de balear a un carabinero, robar madera y justificar la violencia, H dice que el no baleó al carabinero y que los testigos del baleo no son los carabineros porque no quieren mentir sino 5 testigos protegidos. H dice que han querido sacar a la jueza del casoy que por eso el juicio se ha demorado.
H cree que hay una ofensiva oligárquica contra los mapuches que la ley Nain-Retamal la aprobaron para condenar a los mapuches y la ley anti tomas va a significar declararle la guerra a las comunidades que han ocupado fundos de las forestales.
16 00 me despido de H, le digo que volveré en Diciembre y traeré más libros. En el pasillo un gendarme me pregunta por la manta, le digo que la regalé a H porque hacía mucho frío, el gendarme me dice que van a pedir que castiguen a H . A la salida me despido de D y una joven profesora de historia pareja de unos de los presos me lleva al terminal. En el camino me cuenta que cuando detuvieron a su pareja la despidieron del colegio y que ahora trabaja en Angol.
En el terminal me siento en una banca a esperar que llegue el Eme bus que viene de Lota o Coronel.